Hace unos meses, México -en específico, el Distrito Federal- hizo polémica de un tema tan real y tan tangible: transexualismo.
Para ello, conversé con Nancy García González, quien escribió la historia 'Atrapada en otro cuerpo. La vida de un transexual cubano', para despejar muchas de las tantas interrogantes que se forjan a través de éste tema poco comprendido.
La entrevista. . .
Israel Mendoza Torres (IMT).- Nancy, es un enorme gusto el poder charlar contigo. Y a propósito de tu libro ‘Atrapada en otro cuerpo. La vida de un transexual cubano’ (que abordaremos más adelante) cuéntanos ¿qué es el transexualismo?, para que nuestros amigos lectores sepan a bien de lo que estamos conversando.
Nancy García González (NGG).- “Las personas transexuales experimentan de manera constante una incongruencia entre su sexo biológico y su identidad de género. Con frecuencia aluden al dilema que les asedia como el de sentirse atrapado en un cuerpo que no es el suyo”.
“Es importante no confundir a los transexuales con los travestis, que utilizan vestiduras del sexo contrario, pero que, generalmente, no desean cambiar para siempre ni de aspecto ni de anatomía” [Extraído, por la entrevistada, del libro: Copyright © Masters, W; Johnson, V, Kolodny, R: La Sexualidad Humana. Editora Revolucionaria, 1987, p.321].
IMT.- ¿En qué consiste la operación de cambio de sexo?
NGG.- Existen dos tipos de cirugías de reasignación de sexo: de hombre a mujer, y de mujer a hombre, según sea el caso. Describir todos los pasos de estas cirugías resultaría demasiado extenso, por lo que me limitaré a presentar los aspectos más importantes de cada una.
La de hombre a mujer se llama vaginoplastia y consiste en: penectomía y reconstrucción de la vagina con la piel que se extrae del pene. Con el glande se elabora el clítoris y los genitales externos se forman con la piel de los escrotos. La de mujer a hombre se llama faloplastia y obviamente es la más compleja.
Se comienza por quitar los senos quirúrgicamente y por vía endoscópica, los ovarios, el útero, etc., para desaparecer la menstruación. Posteriormente se someten a otras intervenciones para la reconstrucción de los genitales externos a partir de injertos de piel que puede ser de diferentes zonas del cuerpo y finalmente se procede a la inserción de prótesis para garantizar la erección del nuevo pene.
Estas técnicas pueden diferir en algunos aspectos debido a muchos factores, pero el principio será el mismo.
IMT.- ¿Cuáles son los beneficios que obtienen las personas que se someten a dicha intervención quirúrgica?
NGG.- Los expertos en el tema afirman que los principales beneficios son sicológicos, ya que cuando se logra la perfecta sintonía entre cuerpo y mente se adquiere el equilibrio emocional imprescindible para la vida y aumenta la autoestima, además de que para ese momento, su condición legal ya responde al sexo que desea asumir, lo cual es muy importante en el aspecto social.
IMT.- Y ¿qué hay de las consecuencias no favorables que puedan tener?
NGG.- Las consecuencias no favorables pueden ser las mismas que en cualquier otra cirugía.
IMT.- Evidentemente, así lo has dicho en tu libro, y los diversos textos científicos existentes alrededor del mundo, nos dicen que es una operación irreversible, ¿por qué?
NGG.- Obviamente es irreversible para ambos sexos porque implica la reconstrucción total de los genitales internos y externos.
IMT.- Un hombre que ha sido sometido a ésta operación, ¿puede llevar su vida cotidiana como una mujer normal?
NGG.- Por supuesto. Si planteamos que un transexual es una persona que no concuerda su identidad emocional interna con el aspecto de los genitales y características sexuales secundarias, al someterse a la cirugía anula esa condición y por tanto su vida adquiere la normalidad que nunca tuvo.
Aclaro que previo a la cirugía, a partir del diagnóstico definitivo que debe otorgarle un equipo multidisciplinario de especialistas relacionados, se le efectúa un cambio de identidad legal, el cual consiste en reemplazarle su documentación personal actual por otra con el nombre y apariencia del género que adoptará desde ese momento.
La reasignación de sexo es el último paso que se asume.
IMT.- ¿Su vida sexual la puede disfrutar a plenitud como cualquier mujer?
NGG.- En este caso la respuesta es cuestionable, pues de acuerdo con los resultados de las investigaciones internacionales realizados hasta el presente, muchísimas mujeres no disfrutan a plenitud su vida sexual.
Como el placer sexual tiene un gran porciento de influencia sicológica, es factible que la cirugía aporte a estas personas –válido para ambos sexos- una plenitud que antes nunca sintieron, pero esto, obviamente, es muy difícil de confirmar.
IMT.- ¿Podrá algún día embarazarse?
NGG.- Imposible, pues carece del sistema reproductor.
IMT.- ¿Cuáles son los riesgos?
NGG.- Aparte de coincidir con los riesgos que implica toda cirugía, en este caso aumentan por la magnitud de la misma. Se pueden presentar infecciones de la uretra, rechazo a los injertos, que la reconstrucción genital no cubra las expectativas del paciente, etc.
IMT.- En la Ciudad de México se expuesto el tema, tras muchas jornadas de trabajo continuo, en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) para que posteriormente se convirtiera en ley. Aún los hechos están en la mesa y la ley en la sala de espera. ¿Qué opinión te merece dichos eventos?
NGG.- Me parecen muy positivos y necesarios. Confío en que la sensibilidad humana prevalezca para que se les brinde a estas personas el beneficio de realizarse ante la sociedad y ante la vida como les corresponde. Aprobar esas leyes conlleva permitirles el derecho de ser quienes realmente son.
Es simplemente utilizar el desarrollo que han alcanzado los humanos en la ciencia, para rectificar los errores que comete la naturaleza con los humanos. Es una sencilla demostración de comprensión y amor al prójimo.
IMT.- Hace un par de semanas tuve en mis manos tu novela testimonial ‘Atrapada en otro cuerpo. La vida de un transexual cubano’, que básicamente nos refiere a esas personas que saben que hay muchas contradicciones con lo que se es y con lo que tienen.
Y no es un vano y simple capricho es, sin duda, la realidad que late por cada uno de los poros de quienes necesitan quitarse la envoltura equivocada con la que fueron concebidos. Tú comentas que en enumeradas ocasiones se presentó ante ti el miedo a que la realidad y la ficción se homogeneizaran, ¿fue el caso?
NGG.- Sí, y esa es una situación recurrente. Siempre que no hayas sido testigo presencial de un hecho, existe la duda de si la descripción que escuchas es 100% real.
Por eso, siempre le insistía al protagonista que yo quería escribir su historia, no sus fantasías, y aunque me juraba que todo era cierto, yo verificaba las grabaciones que le hacía con los médicos que me mencionaba, la mamá, etc.
Para ser del todo sincera, lo que no verifiqué fueron sus relaciones sexuales… Por eso, el libro es casi un testimonio.
IMT.- Lázaro, como es el nombre de pila del personaje en cuestión, asumió siempre que era Roxana; una mujer y no un hombre… ¿en qué momento la lucha que tuviste desde adentro de ti misma (con tus valores y la realidad que estabas mirando en ese momento) se tornó favorecedora hacía Roxana?
NGG.- Partamos de que yo no sabía qué era un transexual hasta que conocí a Lázaro. Escucharlo a él transformó completamente mis arraigados conceptos de que sólo existían dos categorías para definir la sexualidad: heterosexuales y homosexuales. A partir de la complicada asimilación de lo que representaba un transexual, acepté conscientemente a Roxana.
IMT.- ¿Cómo fue el trabajo con éste personaje? Porque, supongo que no fue labor cómoda que Lázaro (o Roxana) te detallara su vida; finalmente eras una extraña para ella.
NGG.- Al principio fue complejo, pues debido a las decepciones recibidas, temía depositar su confianza en mí y que yo la traicionara también, pero esto cambió cuando se sintió plenamente aceptada y respetada, cuando comprendió que divulgar su vida era importante para acabar con la ignorancia existente entre la población sobre este trastorno psicosexual.
IMT.- Roxana es un personaje real que ha tenido que trabajar para cumplir su más grande sueño: ser una mujer. ¿Su vida se volvía sólo en esa meta, o cuáles eran las expectativas que tenía ante la vida?
NGG.- La prioridad máxima de cualquier persona es definirse a sí misma. A los que, por suerte, no enfrentamos esa terrible situación, nos es difícil entenderlo. Cuando esa crucial definición no existe, lo demás se le subordina.
Roxana quería ser bailarina, quería ser cantante, pero su carné de identidad decía que era Lázaro, por tanto, o lo hacía como hombre, o no podía hacerlo, y para ella era imposible hacerlo como hombre. Mientras socialmente tu definición es ambigua, las expectativas no cuentan.
IMT.- La historia que has escrito ha sido descrita como novela testimonial, aunque también emites información de interés. ¿Cómo es la vida de un hombre que quiere deshacerse de su cuerpo porque se sabe mujer?
Un transexual vive como un pez fuera del agua, siempre se siente fuera de contexto, porque la primera incongruencia está precisamente en él. Por eso, los transexuales están convencidos de que la solución definitiva radica en lograr la armonía entre su cuerpo y su cerebro mediante la cirugía de reasignación.
IMT.- Cuba es inmensamente arraigada a sus costumbres, pero también a los prejuicios que conllevan éstos. ¿Se habla de asesinatos en aquella entidad debido a conductas transexuales, o se mantienen bajo el resguardo del silencio inducido?
NGG.- No poseo las estadísticas de los asesinatos en Cuba, pero no conozco de algún transexual asesinado. En el caso específico de ellos, la mayoría de las situaciones desagradables que enfrentan se deben a que son confundidos con travestis, lo cual inspira poco respeto en la sociedad a pesar de que cada quien debería ser libre de proyectar su imagen en la forma que más le agrade hacerlo.
IMT.- Lázaro, en tu novela testimonial es descrito como un hombre asumiéndose como mujer (incluyendo su vestuario), en espera de la tan ansiada operación, que trabaja de ayudante doméstica, y ¿los estudios? ¿La mayoría es así? Porque algunos los mantiene la familia, como bien lo mencionas.
NGG.- La Constitución cubana plantea que todos los ciudadanos tienen derecho a la educación gratuita, sin distinciones.
Son las incongruencias de género inherentes a los transexuales, las que dificultan que se integren normalmente dentro de los colectivos escolares y generan el rechazo que provoca la homofobia.
IMT.- ¿Qué ha sido de Roxana, cómo vive, qué hace?
IMT.- ¿En dónde ha sido publicado el libro?
NGG.- En Santo Domingo, República Dominicana, donde resido actualmente, pero fue escrito en su totalidad en Cuba y no le cambié ni una letra, sólo le agregué las notas necesarias para esclarecer los modismos cubanos.
IMT.- ¿Fue difícil que la editorial apoyara tu historia?
NGG.- No. La editorial publica lo que le paguen, independientemente de la temática.
IMT.- ¿Para cuándo lo tendremos en México?
NGG.- Para mí sería un gran privilegio que el libro se comercializara en México. Yo tengo la mejor voluntad de hacerlo, pero no es suficiente para lograrlo. Necesito la voluntad de los mexicanos también, así que espero contar pronto con una distribuidora que me facilite la negociación allá.
Quisiera agregar, que el valor principal de mi libro, y esa fue la intención que me motivó a escribirlo es, a través de la información científica y testimonial que en él se brinda, despertar la conciencia, acabar con la ignorancia sobre un tema tan triste y traumatizante, y demostrar que la transexualidad es un trastorno sicosexual que se padece y no un modo de vida elegido arbitrariamente.
Por eso, a partir de ese dato, los convoco a que reflexionen como yo: piense que usted podría haber sido el protagonista de este libro, o alguno de sus hijos, o cualquiera de sus seres queridos.
Varios, hasta me han confesado sentirse culpables porque ahora reconocen que fueron injustos alguna vez.
Muchas gracias.
IMT.- Gracias a ti. Muchísimos ramilletes de éxito en tus próximos proyectos y en tu vida. Dios te bendiga.
A Israel Mendoza Torres:
"El profesionalismo de este talentoso joven es admirable y digno de los mejores elogios. Su versatilidad es increíble. Por todo esto, sumado a la sencillez y nobleza de alma que lo caracterizan, le deseo que continúe cosechando éxitos, si es posible ser más exitoso". . .
Nancy García González
Nancy García González en breve. . .
Recientemente, en República Dominicana fue lanzado al mercado el libro ‘Atrapada en otro cuerpo. La vida de un transexual cubano’. La considerada novela testimonial fue escrita por Nancy García González, la cual se basó en la historia real de un transexual que caminaba por la calle; además de una documentación científica, psicológica y quirúrgica, y estadísticas (las cuales podrán revisar en el mismo libro).
Y hace poco más de un mes sostuve una extensa entrevista con ella para adentrarnos más en el mundo de lo que hoy es un tema más público que años atrás: la transexualidad.
Nancy García González, quien recientemente festejó un año más de vida, tuvo sus orígenes en La Habana, Cuba. Ahí comenzó a desarrollar muchas de las habilidades que hoy disfruta como escritora. Y no fue, sino hasta el 2006, cuando decidió hacer maletas para trasladarse a Santo Domingo, República Dominicana, en donde le depararía una vida llena de éxitos.
Su trayectoria en las letras comenzó con el humorismo. De 1995 al 2000 el periódico francés ‘L’Humanité’ publicó diversas frases de su autoría. A la par (1999), viaja a Francia para la presentación del cuento ‘Floresta’ que fue editado por otra gacetilla en francés y español.
La felizmente mujer casada ha sido colaboradora del semanario humorístico ‘Palante’. Mientras que revistas y publicaciones cubanas han divulgado sus poemas y frases. Actualmente, los monólogos que ha escrito han sido representados en Cuba y en diversos países con actores de renombre.
Hasta la próxima. . . cuídense mucho!!! Y lean mucho, que eso nos hace fuertes.
Copyright © 2008 Israel Mendoza Torres La entrevista realizada a la escritora Nancy García González está resguardada bajo los términos del Derecho de Autor Prohibida su reproducción parcial o total sin autorización por escrito de su autor.